Por Luis Jijón
Chilpancingo, noviembre 13, 2025.- Tras la polémica generada por el homenaje que su gobierno realizó al ex gobernador Rubén Figueroa Figueroa por el 117 aniversario de su natalicio, la gobernadora Evelyn Salgado Pineda afirmó este jueves que su administración “nunca ha estado ni estará del lado de represores” y aseguró que su compromiso es con la justicia social y la memoria de las luchas populares en Guerrero.
Las declaraciones se dieron durante una gira por El Ocotito, Chilpancingo, en medio de las críticas de organizaciones sociales y activistas, que calificaron el homenaje como una falta de sensibilidad hacia las víctimas de la represión política del pasado y pidieron una disculpa pública al gobierno estatal.
El acto también fue cuestionado por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, quien señaló a Figueroa como represor y pidió al Congreso local revisar el Calendario Cívico para eliminar conmemoraciones que no representen la memoria de las víctimas. La bancada de Morena en el Congreso respaldó la propuesta y anunció su disposición a ajustar la legislación.
En respuesta a la controversia, Salgado Pineda defendió la vocación social de su administración y aseguró que su gobierno mantiene una postura firme en favor del pueblo y de las causas históricas de Guerrero.
“Nunca hemos estado ni estaremos del lado de represores, nunca vamos a perseguir al pueblo, nunca vamos a cerrar la puerta del diálogo”, aseguró.
La gobernadora enfatizó que Guerrero es una tierra marcada por movimientos sociales y por luchas que, dijo, han construido la historia democrática del estado.
“Guerrero es un estado de lucha y resistencia. Aquí caminaron hombres y mujeres que soñaron con un México más justo”, señaló.
Recordó la herencia de figuras como Lucio Cabañas, Genaro Vázquez, Julián Blanco y otros dirigentes sociales, a quienes agradeció por “abrir camino para las libertades actuales”.
“Ellos entregaron vida, libertad y esperanza para que hoy podamos disfrutar de derechos, de libertad y de democracia”, afirmó.
Salgado Pineda reiteró que su compromiso es con la justicia, la dignidad y la memoria histórica del pueblo guerrerense, en un intento por distanciar su gobierno de la polémica y reafirmar su postura ante las críticas generadas desde la sociedad civil y el cuestionamiento de la propia presidenta.