Por Luis Jijón
Chilpancingo, noviembre 1, 2025.- El presidente municipal de Chilpancingo, Gustavo Alarcón Herrera, condenó el asesinato del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, ocurrido la noche del sábado, y demandó resultados inmediatos a las autoridades federales para frenar la violencia que afecta a los gobiernos locales del país.
A través de un comunicado, el edil calificó el crimen como “un ataque contra la democracia, la autoridad legítima y el derecho del pueblo a vivir en paz”.
Expresó su solidaridad con la familia del presidente municipal asesinado, con el pueblo de Uruapan y con los michoacanos “que hoy sufren el dolor de una pérdida injusta y brutal”.
Alarcón recordó que Chilpancingo también vivió “el horror de la violencia política, ya sintió lo que es perder a un presidente municipal en funciones”, dijo en alusión al alcalde Alejandro Arcos Catalán, asesinado el 6 de octubre, a menos de una semana de asumir el cargo.
En seguida se refirió a la situación de Chilpancingo, y recordó que desde hace meses “hemos pedido la intervención de la federación, lo hemos hecho con respeto, con insistencia y con irresponsabilidad”.
Siguió: “Pero la violencia no espera, la inseguridad no da tregua, y los alcaldes no pueden seguir enfrentando solos una guerra que no provocaron”.
El edil sostuvo que el crimen de Manzo Rodríguez y de Arcos Catalán, no pueden quedar impunes.
Como edil suplente, Gustavo Alarcón asumió el cargo en octubre de 2024, tras el asesinato de Arcos Catalán.